Hoy descargamos el membrillo para salvar sus ramas (llegaban al suelo) del peso de una excelente cosecha.
Unos pocos serán para dulce de membrillo, pero la mayoría no tienen destino. Nos parece mas lógico darles uso que tirarlos, por eso:
Ofrecemos la cosecha a quien tenga interés y pueda ofrecer algo a cambio. No deseamos dinero si no hacer un intercambio. Hablemos: