Descubrimos el Bierzo por una amiga virtual que nos aconsejó conocerlo.
Los montes de la Tebaida, floridos cual alfombra de primavera, nos encandilaron de forma que surgió el siguiente viaje con el claro objetivo de buscar un sitio propio en este paraíso natural.
Lo encontramos en San Juan de la Mata. En un solo viaje conseguimos lo que hoy es Vierden aunque en un estado deplorable.
Ya se sabía, oficialmente reconocido por la ONU, lo del cambio climático, por eso, en 2006 la intención no era solo hacer turismo, sino cambiar de vida. Así empezó una secuencia de viajes, cada 15 días y en vacaciones, durante nueve años en los que cambiamos la casa y el campo hasta que en 2015 dimos el salto para dejar de decir ‘qué bonito‘ cada quince días y hacerlo cada día del año.
Cuatro años más tarde, gracias al trabajo constante que te permite vivir en el sitio, la casa había adquirido nuevos atractivos y parte de nuestra personalidad. Por ello le pusimos nombre.
Vierden es una palabra diseñada por sus contenidos:
- Verde como es El Bierzo
- Precioso como el jardín del paraíso, un Edén.
- Contiene en su corazón al Bierzo que en su origen se escribía con V
